El Ancla, en el cristianismo, recibió el concepto de promesa en Cristo, por consiguiente en la vida y salvación del alma, y este es el concepto que semeja haber triunfado mucho más. En el campo funerario podemos encontrar el ancla ahora muy usada en las catacumbas de Roma.
Tumba de David Belilios, fallecido a los 16 años (marzo de 1898). Cementerio judío de Hong Kong.
¿Qué ves en un cementerio?
Paseo fotográfico por el Cementerio de Prazeres
A pocos metros de donde se detiene el identificable color amarillo del tranvía 28, viramos la mirada hasta quedarnos solo en blanco y negro. Habiendo cambiado la cámara para esta manera, entramos a ella por una avenida primordial que nos hace intuir que esta visita, si se desea, puede perdurar múltiples horas. O, por lo menos, de incontables devoluciones. Algo similar me pasa siempre y cuando voy al Cementerio de San Isidro de La capital española, el mucho más ilustre de los extraños de la ciudad más importante de españa, donde siempre y en todo momento acercamiento nuevos datos que me invitan a regresar. En las dos llevo siempre y en todo momento la cámara en blanco y negro, por el hecho de que no se me sucede mejor forma que reflejar los datos mortuorios y supuestamente sombríos que pueblan este género de cementerios con bastante paralelismo entre ellos.
¿Qué se pone tras una lápida?
En la mayoría de los casos, se añade un mensaje corto, llamado epitafio, a la lápida, adjuntado con el nombre de la persona, la fecha de nacimiento y la fecha de muerte. En la mayoría de los casos, el propósito del epitafio es prestar ciertas expresiones de sabiduría, comunicar los valores mucho más esenciales del difunto o sintetizar la vida de la persona.
Una mano con el dedo índice apuntando hacia arriba representa la promesa del cielo, al paso que una mano con el dedo índice apuntando hacia abajo representa a Dios extendiéndose hacia el alma. Consideradas un símbolo esencial de la vida, las manos talladas en las lápidas representan las relaciones del difunto con otros humanos y con Dios.
¿Qué es un ancla espiritual?
El ancla representa nuestra promesa en la mitad de la tormenta, es nuestra promesa en Jesús. Isaías 40:29-31 afirma: Él da fuerzas al agotado y multiplica las fuerzas a los que no las tienen.
El propósito de un ancla es sostener el barco seguro en un espacio preciso o contribuir a supervisar el barco en el caso de mal tiempo.