Qué pasa si no nos arrepentimos

Si no rezamos o no somos afables con el resto, seguramente no nos arrepentimos. En el momento en que nos arrepentimos, nuestras vidas cambian. El presidente Kimball ha dicho: “Primero, la persona se arrepiente. Habiendo llegado a este paso, tienes que vivir según los mandamientos del Señor para sostener esta virtud.

El arrepentimiento es un sentimiento tan común al humano como la alegría o la tristeza. Durante la vida acumulamos ocasiones en las que nos agradaría haber actuado de otra forma, tomado resoluciones que deberíamos haber descartado o vivido instantes que por supuesto no merecían tal carga sentimental.

No es un valor absoluto, pero hay grados de arrepentimiento y, eminentemente, muchas maneras de encararlo. “Las conmuevas en sí mismas no son positivas ni negativas. Sí, en cambio, el accionar que nos causan”, enseña el Dr. Gema Rubio, sicóloga del centro Sinews MTI de La capital española. “Frente a una situación, si pienso ‘me equivoqué, me equivoqué, me lo anticipé… pero errar es de humanos’, tenemos la posibilidad de sentir un arrepentimiento que, si bien no es interesante, no es dañino. En cambio, si pensamos ‘de qué forma pude, lo que hice es horrible, soy egoísta, jamás aprendo…’ y adelantamos las secuelas negativas, aparecerá el arrepentimiento lleno de culpa, vergüenza y otras conmuevas que hacernos sentir peor.

Mitos sobre la culpa

En el momento en que sientes culpa, arrepentimiento o vergüenza, siempre y en todo momento existe algún pecado o delito que has cometido contra el resto. Este mito tiende a ser empleado por otros para culparnos o abochornarnos por llevar a cabo lo que ellos desean. Esto se conoce generalmente como poner una «responsabilidad» en un individuo. De qué manera lidiar con la culpa, la vergüenza o el arrepentimiento es dependiente de:

• La fuente o causa del sentimiento (¿Quién/qué está ocasionando la culpa?)
• La validez del sentimiento ( el sentimiento es cierto o es imaginario?)

Contestación

Me da la sensación de que quizas no se entendio bien lo que Dios esta intentando con nosotros decir en DyC 19:15-20:

¿Es viable conseguir alivio?

Los siquiatras nos comentan que la gente que no tienen la posibilidad de aislar o integrar ese acontecimiento pasado en su chato experiencial acentúan el arrepentimiento, gracias a un fallo muy característico: cotejar ese acontecimiento con acontecimientos alternos. ¿Qué hubiese pasado si le hubiese dicho que sí a esa persona? ¿Qué sería de mí si hubiese decidido realizar esto? ¿Y si podría haber sido un tanto mucho más intrépido?

Todo lo mencionado no hace mucho más que agudizar aún mucho más el padecimiento sensible. Los estudios asimismo nos dicen algo interesante: la gente se arrepienten mucho más de los desenlaces negativos derivados de las acciones efectuadas que de las secuelas de no haber hecho algo.

Por qué razón debemos confesarnos: el pecado pausa nuestra comunión con el Señor

Nuestro Dios es un Dios de amor, pero asimismo es beato y justo. Dios no acepta el pecado, con lo que los errores que cometemos crean una barrera entre nosotros y Él y también interrumpen nuestra comunión con Él.

Podemos consultar esto aun en nuestras relaciones humanas. Supón que ofendiste a tu amigo al decir expresiones humillantes y jamás te disculpaste. Los dos sienten que hay una brecha entre ustedes, pero hasta el momento en que aclaren las cosas disculpándose, sencillamente no tienen la posibilidad de sentirse cómodos en la presencia del otro.