Comentan que en el comportamiento sexual dejamos una huella energética y kármica, esto es, si la otra persona generó alguna consecuencia negativa, comparte algo de eso contigo. Al canjear vibraciones creamos nudos de energía sutil donde, con independencia del tiempo y el espacio, este trueque prosigue.
¿El sexo hablamos de experiencias físicas o hablamos de un amor profundo y también íntimo con otro humano? No hay una contestación adecuada o errónea sobre esto. No obstante, quienes nos encontramos en el sendero del desarrollo personal, espiritual y consciente sentimos la necesidad de buscar escenarios mucho más profundos de privacidad en nuestras relaciones íntimas. La privacidad marcha en varios escenarios; hay privacidad recíproca con los cuerpos del resto, privacidad a nivel mental en el momento en que compartimos nuestros pensamientos mucho más profundos y también privacidad sensible en el momento en que compartimos nuestros sentimientos mucho más profundos. Pero asimismo existe la privacidad espiritual, esta clase de privacidad es extraño y no es moco de pavo de hallar o desarrollar con otro humano, pero es algo que nuestros corazones tienen la posibilidad de anhelar conforme amanecíamos mucho más intensamente en el sendero espiritual.
La privacidad espiritual es privacidad a nivel del alma. Opuestamente a la percepción habitual de que, visto de lejos, todo es amor y felicidad, de todos modos tiende a sacar a la luz capas mucho más profundas de mal, lesiones y restricciones que precisan ser procesadas. No obstante, en todo hay una profunda conexión de corazón y la intención de respaldarse mutuamente a través del desarrollo de cada individuo. Esta clase de relación necesita altos escenarios de conciencia y profundos escenarios de empatía. Por una parte, tienes que estar atento al pasar por un desarrollo para no proyectarte en tu pareja, al paso que por otra parte, has de ser con la capacidad de sostener un espacio seguro a fin de que la otra persona realice sus procesos contigo. su lado. , irradiando amor. 🇧🇷
La valentía de exhibirnos así como somos
Ser valeroso es enseñar nuestra esencia y escoger nuestra vericidad a fin de que el resto nos vean. Solo de esta manera nos van a conocer enserio y solo de este modo vamos a poder tener certeza de que los que están junto a nosotros nos desean así como somos.
Lo que la multitud suelta en el momento en que tiene relaciones íntimas
Primeramente, es esencial tomar en consideración que Dios creó el sexo y lo considera bueno. En la Biblia afirma que el matrimonio es “honroso en todos, y el lecho sin mácula; pero a los fornicarios y a los infieles los juzgará Dios» (Hebreos 13:4).
El sexo es un obsequio de Dios para las parejas casadas. Es una manera de privacidad que les contribuye a conectarse mucho más intensamente entre sí. En el momento en que se utiliza en como Dios lo dispuso, es una experiencia muy exitosa.
De esta manera, tus relaciones íntimas van a ser mucho más sanas y lumínicas, ya que la energía sexual es sagrada, es creativa, es vigorosa, y tu cuerpo es tu hogar.
Comentan que lo que procuramos asimismo nos busca a nosotros y todo cuanto hemos vivido hasta la actualidad es una parte de nuestro desarrollo y autoconocimiento.
Eres tu mejor emprendimiento, eso es por qué razón se estima que precisas asistencia para romper patrones y dejar de atraer mucho más de lo mismo, búscala, constrúyete como desees con el deber que eso supone.