Admite las conmuevas ocasionadas por el daño que te hicieron, reconoce de qué manera estas conmuevas afectan tu accionar y haz un esfuerzo por soltarlas. Escoge perdonar a quien te ofendió. Libera el control y el poder que tenía sobre tu vida la persona que te ofendió y la situación donde te ofendió.
«Si deseamos querer enserio,
debemos estudiar a perdonar»
Admite tus lesiones y di lo que sientes
Si tus sentimientos están atormentando, solo di. Admite que la situación te hace daño, este es el paso inicial a fin de que te sueltes y sueltes. Di todo cuanto te perjudica, acepta que no te hace ningún bien y que precisas soltarlo de alguna forma. Al llevar a cabo esto, se va a sentir bastante superior y va a estar listo para perdonar.
Qué supone una separación para los pequeños
Primeramente, es esencial no denegar la verdad y comprender que la separación o el divorcio de los progenitores son procesos muy lacerantes para pequeños. En verdad, tras la desaparición de un individuo cercano, la separación entre padre y madre es el hecho mucho más traumático que vive una familia.
Para los hijos, el divorcio de los progenitores es como una suerte de separación en el curso de la vida, en la seguridad y previsibilidad que aguardan que les den sus progenitores. En este sentido, tus primordiales reacciones tienen la posibilidad de ser la ansiedad, la furia y la tristeza. Asimismo el temor al abandono y la culpa, en tanto que piensan que, de alguna forma, tienen la posibilidad de haber contribuido al divorcio.
¿Es bueno perdonar?
Existen muchas causas por las que se puede decir que es realmente bueno perdonar. Al perdonar, dejamos ir resquemores y conmuevas como la furia o la necesidad de venganza.
Perdonar da paso a la paz, la tranquilidad y nuevos episodios en tu vida que quizás estés eludiendo al resistirte al perdón, al meditar «No sé de qué manera perdonar». , en el momento en que de todos modos es algo que está en todos nosotros.